Una gran estrella y... 132 fans incondicionales

Obras maestras

Leonardo di ser Piero da Vinci, conocido como "Leonardo da Vinci", Retrato de Mona Lisa, conocido como La Gioconda Sala 711 (sala de los Estados), ala Denon, planta 1

Retrato de Lisa Gherardini, llamada "Mona Lisa" o "La Gioconda"

Leonardo da Vinci

Leonardo da Vinci daba una importancia especial a esta pintura, ya que nunca se separó de ella. Desde su llegada al Louvre, La Gioconda se ha presentado como una joya. El cuadro seduce por la calidad excepcional de su ejecución, por esa famosa sonrisa y por el paisaje fantástico del fondo y el sfumato que rodea a la modelo con un halo. La fascinación ejercida por La Gioconda la ha llevado a vivir peripecias que han intensificado su condición de estrella. En 1911, un artesano italiano la robó para llevársela a su país, un hecho que desencadenó pasiones en la prensa.

Desde 1966, está instalada en la mayor estancia del museo, la sala de los Estados. Esta frágil y célebre obra maestra se conserva en las mejores condiciones posibles, protegida por una vitrina que permite un control sumamente preciso de la temperatura y la humedad ambientales.

Las bodas de Caná

Paolo Caliari, llamado Veronés

Mientras haces cola para encontrarte cara a cara con La Gioconda, puedes aprovechar para echar un vistazo a Las bodas de Caná, que está justo enfrente. De todas formas, con el tamaño que tiene el cuadro, es difícil que no lo veas: con casi 70 m², es el más grande del Louvre. Para decorar el refectorio de un convento de Venecia, el Veronés tuvo la audacia de representar una escena bíblica dentro de un contexto moderno: el de una fiesta veneciana. Consiguió un gran éxito y nuevos encargos. Las tropas napoleónicas se apoderaron de esta obra en Venecia en 1797. Hubo que enrollarla para trasladarla a París.