Un museo con cabida para todas las artesEl pabellón de Sesiones
Con la inauguración del pabellón de Sesiones en el año 2000, el Museo del Louvre se abrió a las artes de todos los continentes, para así emprender un viaje artístico por las culturas de África, Asia, Oceanía y las América.
120 obras maestras procedentes de todo el mundo
En las salas del pabellón de Sesiones se mezclan esculturas africanas, un jarrón maya, un poste de casa ceremonial de las islas Salomón, una cabeza de estatua de la isla de Pascua, máscaras del Ártico y muchas otras piezas... Aquí, la arquitectura interior de Jean-Michel Wilmotte se muestra sobria y depurada para resaltar la diversidad de formas y materiales.
“Las obras maestras nacen libres e iguales”
La instalación en el Louvre de las artes de África, Asia, Oceanía y América fue la culminación de un largo proceso. Su primer acto de presencia dentro del Louvre se remonta a 1827, cuando el rey Carlos X creó el Museo de la Marina y la Etnografía. Las obras expuestas fascinaron al público y fueron todo un éxito. Sin embargo, aunque las civilizaciones no occidentales suscitaban interés, por entonces eran pocos quienes reconocían el valor artístico de esas colecciones, por lo que en 1905 las obras se diseminaron por varios museos.
Poco a poco, y gracias a artistas como Pablo Picasso, estas piezas fueron adquiriendo la categoría de obras de arte. En 1909, el poeta Guillaume Apollinaire expresó su deseo de que el museo volviera a acoger esas obras maestras, “cuya apariencia no es menos conmovedora que la de los hermosos especímenes de la estatuaria occidental”.
A lo largo del siglo 20, la idea fue progresando. Finalmente, ya en 1990, Jacques Kerchache, gran especialista en culturas extraoccidentales, publicó un manifiesto firmado por 300 artistas, filósofos, antropólogos e historiadores del arte, Las obras maestras nacen libres e iguales. En él reclamaba la creación en el Louvre de un departamento dedicado a las artes de África, Oceanía, América e Insulindia, que agrupaba con la denominación de «artes primigenias».
El pabellón de Sesiones
En 1996, el presidente de la República, Jacques Chirac, anunció la creación de un museo que reuniría las dos colecciones francesas de artes primigenias: la del Museo Nacional de Artes de África y Oceanía y la del Museo del Hombre. Así nació el Museo del Quai Branly, que debía ofrecer el sitio que les correspondía a culturas y civilizaciones despreciadas por Occidente desde hacía demasiado tiempo. Asimismo, Jacques Chirac decidió trasladar una selección de obras maestras de esas colecciones al Louvre.
Para exponer esas 120 piezas destacadas se eligió el pabellón de Sesiones, construido durante el Segundo Imperio por Hector Lefuel para acoger las sesiones parlamentarias. Hoy, las artes de todos los continentes están representadas en este museo universal.
Obras destacadas
Escultura antropomorfa Trrou Körrou, conocida como el Hombre azul
1 sur 10
¿Sabías que...?
Gu, dios del hierro y de la guerra
¡Es la única estatua africana de hierro a escala humana conocida! Para representar a Gu, dios vudú del hierro, de la forja y de la guerra, su autor recurrió a todos los estados del hierro: forjado, laminado, martillado, clavado y remachado. El dios lleva un sombrero plano que evoca los altares conmemorativos asen, con una barra metálica coronada con una bandeja circular que materializaba la presencia de los difuntos. Cuando los guerreros partían hacia la batalla, encomendaban al dios sus promesas de actuación y los retos que se comprometían a afrontar. A cambio, Gu debía protegerlos de sus enemigos.
Los moáis, las estatuas de la isla de Pascua
Esta cabeza de estatua gigante de la isla de Pascua (moái) representa probablemente a un dios o un ancestro divinizado. Los moáis estaban situados en lugares sagrados elevados (ahus) para protegerlos. Esta cabeza representa dos quintas partes de la escultura, que debía de alcanzar los cinco metros de altura. La parte superior del cráneo es plana: como otros moáis, la estatua debía de llevar un gran tocado plano circular de roca volcánica roja.